En los fértiles pagos
de Valcuevo,
donde transcurre el Tormes,
pausado y lento
sintiendo ya en sus aguas
próximo el Duero,
reciben los monjes
al extranjero.
Les habla de aventuras,
descubrimientos,
de las lejanas indias
de una Tierra distinta,
de un mundo nuevo.
Oyen los dominicos
aquel proyecto,
en las huecas estancias
de su convento;
entre chopos y encinas,
salmos y rezos,
la
más grande Historia
se está escribiendo.
Por la imponente Hacienda
hoy yo paseo;
su aire soberbio
y el otoño dibuja
un cuadro espléndido,
rojo, naranja, ocre,
en las piedras doradas
del monasterio.
Las hojas amarillas
están cayendo;
los racimos se exhiben
en los viñedos
y una tranquila brisa
rompe el silencio.
Llega desde los siglos
aquel encuentro;
es Colón el que habla,
así lo siento
en la dulce mañana
de otoñal cielo
paseando por los fértiles
¡Buen fin de semana!
Precioso recorrido , con unas maravillosas y espectaculares fotografías. La poesía plasma la belleza del lugar .Felicidades a todos , salís guapísimos y aunque me reitere , repetiros que formáis una familia estupenda. Buen fin de semana.
ResponderEliminarSaludos.
Muchísimas gracias por tus cariñosas palabras. Sé, por tu blog, que te gusta dar a conocer las maravillas de España y me siento muy orgulloso de que, entre tantas páginas, elijas también este blog para conocer nuestro país. Un beso
EliminarMuy bien, hijos.
ResponderEliminarMagnífico reportaje de fotos y el poema. Conocemos la Hacienda Zorita y es como si hubiéramos vuelto.
Los Arapiles no pude visitarlos cuando lo he intentado, pero esté precioso y profundo todo.
Besos.
Papás
Muchas gracias, papá; me alegro de que os haya traído buenos recuerdos. Un beso
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