Es tiempo de Pascua
en la Plaza Vieja,
cintas de colores
el lugar alegran,
suenan los acordes
de una gran orquesta.
A las cinco en punto,
el reloj que suena,
tañe la campana
de la calavera
y los doce apóstoles
su giro completan,
el público admira
la medieval técnica.
Y en la torre alta,
poderosa y regia
que domina sobre
la ciudad entera,
se escuchan las notas
ya de la trompeta;
un antiguo heraldo,
tal vez de otra era,
de siglos pasados,
su tributo deja.
Es Praga, es abril,
es la primavera;
son las emociones
que en el alma quedan,
compartir momentos
de magia y belleza
la vida y la Historia
fluyendo en las venas.
De Pascua se adorna
la capital checa;
colores al viento
en la Plaza Vieja... © A. Manrique Cerrato.- 2017
¡Buena semana, amigos! |
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