Hoy, para celebrar el día de San Juan de Sahagún, patrón de la ciudad de Salamanca recupero esta poesía dedicada a uno de sus más ilustres personajes...
Se trata de "La Rana", una de las vecinas más famosas de la capital charra.
Aunque, según se cuenta la representación de esta "rana" (que en realidad es un sapo) encima de una calavera, hace referencia al pecado, la lujuria y la muerte, sin embargo, después de cinco siglos, el sapo de mal agüero pasó a convertirse en "la ranita de la suerte"; cosas del turismo...
Aunque, según se cuenta la representación de esta "rana" (que en realidad es un sapo) encima de una calavera, hace referencia al pecado, la lujuria y la muerte, sin embargo, después de cinco siglos, el sapo de mal agüero pasó a convertirse en "la ranita de la suerte"; cosas del turismo...
Mira, ¿la ves?
enfrente.
La rana coqueta
La rana coqueta
de la buena suerte
o el sapo inquietante
unido a la muerte.
¡Venga!,
ahora,
¡Espera!
¡Mira!, sigue mi mano
¡Allí en la columna!
al lado de la calavera.
Tendrás suerte,
aprobarás todo
si la encuentras.
La humilde ranita
de escudos grandiosos,
de inscripciones épicas.
Ella,
pequeña,
discreta,
se lleva la fama
en la gran sinfonía
escrita en la piedra.
Ella,
pequeña,
discreta,
se lleva la fama
en la gran sinfonía
escrita en la piedra.
Bajo el sol ardiente
ante cientos de ojos
que la observan;
o en el crudo invierno
en la fría soledad
de la plaza recoleta.
Allí,
para siempre
quieta
posada impasible
encima
Sí, sí,
por allí.
bajo la mirada inmutable
de Fray Luis.
Nuestra rana entrañable
pequeñita,
tierna,
la que todos buscan
¡Genial! Un abrazo desde Segovia. Marisa Alonso Santamaria
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